Cientos de pequeños con malformaciones en sus extremidades se benefician de las intervenciones sin costo gracias al convenio entre la prefectura del Guayas, el Hospital León Becerra y la Fundación Esperança
“Necesitamos una sociedad mucho más compasiva, más solidaria y ayudar a nuestros niños y niñas a crecer en un ambiente que sea propicio y no de burla, que les permita acceder a cirugías totalmente gratuitas”, dijo la prefecta Susana González.
Médicos extranjeros de la Fundación Esperança atenderán en hospital León Becerra del 15 y 19 de noviembre, a decenas de pequeños con malformaciones óseo-musculares de brazos y piernas, que se benefician de esta atención que cubre consultas de preselección, así como gastos de exámenes prequirúrgicos, de quirófano, hospitalización, medicamentos, insumos especiales y consultas postquirúrgicas.
De “maravillosa” calificó a esta acción humanitaria Yeritza Zúñiga, madre de David, un pequeño de 4 años que nació con una malformación en los dedos de los pies. “Agradezco a la Prefectura, en especial a la prefecta Susana González por tomarnos en consideración, apoyarnos y respaldar la salud de nuestros hijos”, expresó.
Danny del Pezo, padre de Ian, de 8 años, contó que carece de recursos para operar a su hijo de una deformidad congénita de sus pies y que su salvación la encontró en esta misión médica. “A la prefecta Susana González le quedo muy agradecido y de corazón le pido que siga con estas campañas”, dijo.
Ricardo Koenig, presidente de la Benemérita Sociedad Protectora de la Infancia, destacó esta gestión de ayuda social conjunta. “Cuando la primera vez que la prefecta Susana González nos apoyó, le dije que era un privilegio. Me encanta que este privilegio se repita con tanta frecuencia y que haya decidido poder apoyarnos en todas las misiones humanitarias que traiga el hospital León Becerra”, sostuvo.
“Sin duda alguna, las operaciones hacen milagros, pero el verdadero milagro está en el amor, en la constancia y en la dedicación”, dijo la prefecta. Agregó que “incluir a todos en la salud se trata de derechos, pero también de dignidad, a un trato igualitario, justo y una oportunidad de que nuestros niños, nuestras niñas tengan una mejor calidad de vida”.