La forma en la que nos vemos, sentimos y actuamos todos los días está estrechamente vinculado con nuestra dieta y es por esto por lo que los consumidores están comenzando a pensar en una vida saludable y el bienestar en forma holística. Con la llegada del nuevo año, Susan Bowerman, directora senior de nutrición de Herbalife Nutrition, presenta a continuación algunas de las tendencias de nutrición para tomar nota en 2023:
- Dieta en base en productos de origen vegetal: Los alimentos de origen vegetal son densos en nutrientes, esto significa que ofrecen abundantes nutrientes comparado con su costo calórico. Las frutas, los vegetales y granos enteros son excelentes fuentes de vitaminas, minerales y fitonutrientes, y son naturalmente libres de colesterol. La mayoría de ellos aporta una buena cantidad de fibra que ayuda a tener un intestino saludable para que el tracto digestivo funcione bien y ayude con el sistema inmune y reduzca la inflamación.
- Personalización: Los consumidores se están alejando del enfoque genérico para gestionar sus metas de alimentación. Se trata de un fenómeno particularmente importante entre los millenials y la Generación Z, de los cuales el 49 por ciento y el 37 por ciento, respectivamente, expresó su mayor preferencia por productos, servicios o aplicaciones que aprovechen los datos personales para personalizar la experiencia del consumidor (McKinsey). Son varios los factores que determinan cómo se puede personalizar la dieta. A medida que se generalizan diferentes formas de evaluaciones personalizadas, contamos con más información acerca de nosotros mismos que se puede utilizar para personalizar nuestras dietas, a fin de tener una vida más saludable o cumplir con metas específicas. La cantidad de ejercicio que hacemos, cuánto y qué comemos, así como también la edad son factores decisivos.
- Nutrición de doble función: Otra tendencia de la que estamos siendo testigos es la mayor demanda de productos y alimentos destinados a múltiples dimensiones del bienestar. Los consumidores buscan formas de tener una vida más saludable a través de alimentos funcionales, es decir, alimentos que ofrecen beneficios más allá del simple valor nutricional. Las frutas, verduras, frutos secos, semillas y granos integrales ricos en nutrientes se consideran alimentos funcionales. Pero también pueden ser alimentos funcionales los que están fortificados con nutrientes como vitaminas, minerales, fitonutrientes, probióticos o fibra. A modo de ejemplo, los consumidores actuales buscan productos que los ayuden a enfrentar los desafíos para una vida psicofísica saludable. Esto incluye tés de hierbas que ofrecen delicioso sabor y también efectos calmantes o ayudan a dormir mejor. El colágeno es un ingrediente muy popular que está ingresando en muchos alimentos funcionales y es sabido que contribuye a tener huesos saludables y ayuda con el aspecto exterior del cabello, piel y uñas.
- Alimentos buenos para los intestinos: El interés de los consumidores por alimentar un microbioma intestinal saludable seguirá escalando en 2023. Una dieta rica en fibras prebióticas ayuda a promover el desarrollo de bacterias buenas (probióticos) en el tracto digestivo y contribuye a un buen equilibrio del microbiota en el sistema. Los probióticos se encuentran naturalmente en alimentos como yogur, kefir, tempeh, miso y verduras en escabeche fermentadas, pero además ahora se encuentran también en una variedad de alimentos funcionales y suplementos. Además, se espera ver más productos para cuestiones digestivas específicas, por ejemplo, más productos libres de gluten. El gluten es una proteína que se encuentra básicamente en el trigo, pero también en la cebada, centeno y productos relativos al trigo. Una dieta baja en FODMAP también se recomienda para las personas que padecen síndrome de colon irritable, que constituye el trastorno digestivo más común en Estados Unidos y que puede provocar dolor e hinchazón del estómago. FODMAP significa «oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables» y hace referencia a determinados carbohidratos que a mucha gente le resulta difícil digerir. Como consecuencia, las bacterias intestinales descomponen estos componentes y liberan gases en el proceso. La dieta baja en FODMAP es bastante restrictiva, pero los productos alimentarios con bajos FODMAP están llegando a las góndolas de los negocios, facilitando la gestión de la dieta.
Las dietas buenas para los intestinos también están cobrando popularidad por los efectos que tiene un microbioma saludable en la salud general del cerebro. El cerebro y el tracto digestivo están constantemente comunicados entre sí. De hecho, las pruebas sugieren que cuando el microbioma interactúa con el sistema nervioso central, se regula la química del cerebro y ejerce influencia en los sistemas neuroendócrinos asociados con la repuesta ante el estrés, ansiedad y función de la memoria.
Fuente: Por Susan Bowerman, Directora de nutrición de Herbalife Nutrition.