El peor estiaje (falta de lluvias) de los últimos seis años y la falta de mantenimiento de las centrales hidroeléctricas llevan a Ecuador a importar el 72% de la electricidad.
A pesar de que la campaña de construcción de centrales hidroeléctricas en Ecuador, llevada a cabo durante gobierno de Rafael Correa, tenía el objetivo de exportar energía a Colombia y Perú; actualmente, las ocho principales hidroeléctricas del país solo trabajan al 41% de su capacidad.
La producción promedio mensual de esas hidroeléctricas “está por debajo del promedio y, en ciertos meses, cerca de los valores mínimos históricos “, según informe del Cenace.
La generación de electricidad de Ecuador ha caído un 22%, entre el 1 y el 20 de diciembre de 2022, comparado con el mismo periodo de 2021.
Aunque, el año pasado Fernando Santos, ministro de Energía, hizo un llamado a los ciudadanos para incentivar el ahorro de electricidad; este 04 de enero de 2023, en una entrevista en Teleamazonas, indicó que la posibilidad de que haya apagones por el estiaje “es muy remota”.
“Los técnicos dicen que no nos quedaremos sin luz”, afirmó.
Además, anunció que en pocas semanas firmarán dos contratos para dos plantas de energía limpia. Una eólica en el cerro Villonaco, en Loja, que generará 100 megavatios y una gran planta solar, de 200 megavatios, donde debía ir la Refinería del Pacífico.
Sin embargo, el escenario no pinta positivo para Ecuador en 2023, el informe de CENACE detalla que la situación será completa, ya que la falta de lluvias se extenderá durante todo este año.