La espumilla, un dulce típico de Ecuador que destaca por su exquisita textura y su sabor inigualable. El encanto de este manjar tradicional tiene relevancia por consumo popular y su origen arraigado en la rica historia culinaria de la provincia de Pichincha.
La espumilla es una delicia emblemática en Ecuador, apreciada por su suave consistencia y su dulzura característica. Se elabora a partir de una mezcla exquisita de ingredientes frescos y se ha convertido en un favorito en las calles del país y durante celebraciones y festividades en todo el país.
El encanto de la espumilla radica en la selección cuidadosa de sus ingredientes naturales, que incluyen:
Pulpa de Frutas Frescas: La esencia de la espumilla proviene de frutas frescas como guayaba, piña o zapote, que se preparan y se combinan para crear la base de esta delicia.
Azúcar San Carlos y Claras de Huevo: Estos ingredientes son esenciales para lograr la textura ligera y aireada de la espumilla. Se combinan hábilmente para obtener una consistencia suave y cremosa.
Esencia de Vainilla: Este toque aromático realza el sabor de la espumilla, añadiendo una nota de dulzura sutil pero distintiva.
A pesar de ser un dulce que proviene de la provincia de Pichincha se disfruta en todo el país, a través de los vendedores ambulantes que la preparan y venden en distintas ciudades. Su textura suave y su sabor dulce la convierten en un postre querido por personas de todas las edades.
La espumilla no solo es un postre delicioso, sino también un símbolo de la riqueza culinaria y la diversidad de sabores que caracterizan a Ecuador. Su origen en la provincia de Pichincha destaca la importancia de las tradiciones locales en la cultura gastronómica del país.
San Carlos es una marca comprometida con la calidad y la autenticidad en la elaboración de productos tradicionales del país, la marca trabaja e impulsa la preservación de las tradiciones gastronómicas.
La dulzura nace en Marcelino Maridueña y la disfruta todo el Ecuador.