El presidente de la República, Daniel Noboa, confirmó este sábado 13 de enero que han sido liberados todos los agentes penitenciarios y funcionarios administrativos que permanecían como rehenes en siete cárceles ocupadas por reclusos amotinados a comienzos de esta semana.
Noboa, en un mensaje en su cuenta de la red X, felicitó a las fuerzas del orden por haber logrado la liberación de los rehenes en las cárceles de las provincias andinas de Azuay, Cañar, Cotopaxi, Tungurahua y Loja; así como en las costeras de El Oro y Esmeraldas.
“Felicitaciones a la labor patriótica, profesional y valiente de las Fuerzas Armadas, Policía Nacional y el SNAI”, el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad, la secretaría penitenciaria del Estado, señaló Noboa.
También destacó el “liderazgo” de sus ministros del Interior, Mónica Palencia, y de Defensa, Giancarlo Loffredo, “por lograr la liberación del cuerpo de seguridad y vigilancia penitenciario y el personal administrativo retenido en los Centros de Privación de Libertad”.
De su lado, el SNAI, en un comunicado, destacó que las acciones conjuntas realizadas entre militares, policías y guardias carcelarios, “concluyeron exitosamente con la liberación de todos los servidores del Cuerpo de Seguridad y Vigilancia Penitenciaria y miembros del personal administrativo, quienes estuvieron retenidos en los diferentes Centros de Privación de Libertad (CPL) del país”.
Al momento, agregó, “se realizan las evaluaciones médicas para salvaguardar a los servidores librados” que, en algunos casos, como en la cárcel de Esmeraldas, fueron rescatados también gracias a la mediación de representantes de las iglesias católica y evangélica.
El SNAI “iniciará las investigaciones pertinentes para determinar las causas y responsables de los últimos acontecimientos” registrados en las prisiones del país, agregó.
Asimismo, reiteró su compromiso “con la seguridad, la rehabilitación y el respeto de los derechos humanos en el Sistema Penitenciario” nacional.
La mañana de este sábado, el SNAI había informado de que 133 agentes penitenciarios y tres funcionarios administrativos permanecían como rehenes en varias prisiones.
La agitación en las cárceles ecuatorianas registradas durante esta semana se suscitó cuando el Gobierno del presidente Daniel Noboa se disponía a poner en marcha su plan para recuperar el control de las prisiones, muchas de ellas dominadas internamente por grupos delincuenciales, cuyas rivalidades han dejado más de 450 presos asesinados desde 2020 en una serie de masacres carcelarias.
Esa violencia también se ha trasladado a las calles hasta hacer de Ecuador uno de los países más violentos del mundo con 45 homicidios intencionales por cada 100.000 habitantes en 2023.
Fuente: expreso.ec