• 970 millones de personas en el mundo padecen trastornos de salud mental según la Organización Mundial de la Salud, superando los casos por COVID-19.
  • Ecuador se encuentra entre los 10 peores países del mundo en cuanto a salud emocional, según una encuesta de Gallup realizada en 2021.
  • La terapia grupal ofrece un espacio seguro para compartir experiencias y reducir el aislamiento, promoviendo la sanación colectiva.

Cada 10 de octubre se conmemora el Día de la Salud Mental, una fecha promovida por la Federación Mundial de la Salud Mental y respaldada por iniciativas como Fundación Vida Plena. Este día cobra una relevancia creciente en un mundo donde los trastornos mentales afectan a millones de personas, convirtiéndose en un llamado a la acción para derribar estigmas y fomentar un diálogo abierto sobre la importancia de cuidar la salud mental.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) califica los trastornos de salud mental como una «pandemia invisible«, destacando su profundo impacto en la sociedad. Según la OMS, actualmente cerca de 970 millones de personas en el mundo padecen estos trastornos, una cifra que supera los 769 millones de casos de COVID-19 reportados hasta ahora. Esta comparación subraya la gravedad de la crisis de salud mental global, que a menudo se pasa por alto en comparación con otras crisis de salud pública.

En Ecuador, la situación es alarmante, según la encuesta de Gallup en 2021, Ecuador se ubicó entre los 10 peores países del mundo en salud emocional, una situación que continúa empeorando por la crisis de seguridad y medioambiente. Además, a nivel global, 1 de cada 4 personas experimentará problemas de salud mental en algún momento de su vida (Organización Mundial de la Salud, 2022).

La salud mental puede verse afectada por múltiples factores. El estrés prolongado, ya sea por presiones laborales, académicas o personales, puede desencadenar ansiedad y otros problemas emocionales. Experiencias traumáticas, como abusos o accidentes, tienen un impacto duradero en el bienestar mental. Además, factores socioeconómicos como la pobreza y el desempleo, así como el aislamiento social y la falta de apoyo, son riesgos significativos.

Entre los padecimientos más frecuentes se encuentran la depresión y la ansiedad, que afectan a millones de personas en todo el mundo. La depresión se caracteriza por una tristeza persistente y una pérdida de interés en actividades diarias, mientras que los trastornos de ansiedad incluyen el trastorno de ansiedad generalizada y las fobias. También son comunes los trastornos de la alimentación y el burnout, un estado de agotamiento emocional y físico relacionado con el trabajo.

En este sentido, la Fundación Vida Plena se presenta como una respuesta vital ante esta creciente crisis de salud mental, ofreciendo terapias grupales totalmente gratuitas basadas en una metodología recomendada por la Organización Mundial de la Salud. Esta iniciativa busca proporcionar un espacio seguro y de apoyo donde las personas puedan compartir sus experiencias y recibir la ayuda que necesitan. “La terapia es crucial para mantener un equilibrio emocional y enfrentar los problemas de manera efectiva”, explica Anita Käslin, coordinadora de grupos y cofundadora de la fundación.

La terapia grupal es especialmente valiosa, ya que ofrece un entorno de apoyo donde los participantes pueden compartir sus experiencias y aprender de las vivencias de otros. Este intercambio no solo ayuda a reducir la sensación de aislamiento, sino que también promueve la empatía y el entendimiento entre las personas que atraviesan situaciones similares. En un grupo de Vida Plena, los participantes pueden sentirse más cómodos al expresar sus emociones y recibir retroalimentación constructiva, lo que puede acelerar el proceso de sanación y crecimiento personal.

Desde el ámbito de la psicología, existen diversos métodos efectivos para trabajar y mejorar la salud mental. Estos van desde aspectos básicos, como mantener un estilo de vida saludable a través del ejercicio, una alimentación equilibrada y un descanso adecuado, hasta la búsqueda de apoyo profesional a través de la terapia. Erica Chacón, especialista en salud mental de Fundación Vida Plena, enfatiza que “no solo debemos reaccionar cuando estamos en crisis; es esencial adoptar un enfoque preventivo mediante herramientas como la ayuda psicológica”.

Anita Käslin alerta que “es fundamental trabajar en la salud mental y no verlas como un problema lejano o extenso. Es una responsabilidad de todos abordar este tema y hacerlo cercano, creando espacios de diálogo y apoyo en nuestra comunidad”. Esta visión subraya la importancia de fomentar una cultura donde pedir ayuda no sea visto como una debilidad, sino como un paso valiente hacia el bienestar.

Si alguien está mal o conoce a alguien que atraviesa un periodo de dolor, puede contactar al 096 417 4955 o visitar www.vidaplena.ec para obtener información gratuita sobre terapias psicológicas grupales. La salud mental es un derecho de todos, y cuidar de ella es esencial para llevar una vida plena y saludable.

Por Yazmín Bustán

Feminista. Trabajando en visibilizar el trabajo que hacemos las mujeres,

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