Los cortes de electricidad en Ecuador representan un desafío significativo para las empresas y sus colaboradores. La incertidumbre causada por la falta de energía afecta el desempeño diario, la planificación de proyectos y, en algunos casos, incluso el ánimo del equipo. En este contexto, las organizaciones deben redoblar esfuerzos para mantener la motivación de sus colaboradores y asegurar un ambiente de trabajo que impulse la productividad, a pesar de las interrupciones. Sebastián Lima, director de Business Solutions de SGF Global en Ecuador, comenta que «la adaptabilidad y la resiliencia se han convertido en cualidades imprescindibles para los equipos de trabajo, especialmente en tiempos de crisis«.
1. Comunicación constante, transparente y empática
Una comunicación efectiva es esencial para que los colaboradores se sientan informados y respaldados. «La incertidumbre se mitiga cuando el equipo sabe que cuenta con el apoyo de la organización», sostiene Lima. Aconseja que los líderes no solo mantengan comunicación permanente con sus equipos, sino que sean transparentes e informen oportunamente sobre los planes de contingencia y cualquier decisión que pueda afectar a los empleados. Esto no solo genera confianza, sino que también motiva a los empleados al sentir que forman parte activa de las soluciones.
Es importante, además, mantenerse informado sobre la situación actual, es decir horarios programados, posibles cambios, etc., para procurar tener mayor control sobre la situación.
2. Fomento de la flexibilidad en los horarios y espacios de trabajo
Ajustar los horarios laborales es una de las estrategias más efectivas cuando se enfrenta a cortes eléctricos. En Ecuador, donde estas interrupciones son impredecibles, Lima enfatiza que “una mayor flexibilidad permite a los colaboradores trabajar en momentos en los que haya menos interrupciones, mejorando así su rendimiento y su ánimo.” Ofrecer la posibilidad de trabajar desde casa, si las condiciones lo permiten, o establecer turnos que se adapten a los horarios de mayor estabilidad eléctrica, puede aliviar el impacto negativo de los cortes. Se puede, por ejemplo, priorizar el trabajo mientras haya luz natural, y, de ser posible, en lugares al aire libre, para quitar la sensación de encierro que causa ansiedad en el trabajador.
3. Inversión en herramientas de productividad y tecnología
La tecnología es un aliado indispensable en este tipo de crisis. Lima señala que “invertir en herramientas como generadores o equipos de respaldo garantiza que el trabajo no se vea interrumpido de forma brusca”. Además, el uso de herramientas en la nube para el almacenamiento y la gestión de proyectos permite a los empleados continuar trabajando sin depender del equipo físico en la oficina. Las plataformas de trabajo colaborativo también facilitan que los equipos permanezcan conectados y organizados.
4. Enfoque en la salud mental y el bienestar de los colaboradores
La situación en Ecuador no solo afecta la productividad, sino también la salud mental de los trabajadores. Los cambios constantes en la rutina y la incertidumbre general pueden generar niveles de estrés elevados. Lima sugiere que “las empresas deben fomentar un ambiente de apoyo, donde el bienestar de cada colaborador sea una prioridad.” Esto puede incluir pausas activas, ofrecer acceso a recursos de salud mental y fomentar permanentemente un ambiente de trabajo positivo.
Adicionalmente, es esencial incluir en el desarrollo de la jornada laboral, espacios de escucha activa, por parte de las jefaturas y cargos medios y altos, en donde los colaboradores puedan sentirse seguros de expresar sus inquietudes y sugerencias. Es esencial que en este momento predomina la empatía y se demuestre comprensión ante los desafíos colectivos e individuales.
5. Reconocimiento y capacitación continuos
En tiempos de crisis, los esfuerzos de los colaboradores pueden pasar desapercibidos debido a la urgencia de las soluciones. Sin embargo, Lima recalca que “el reconocimiento es clave para mantener el ánimo y el compromiso en tiempos difíciles”. Apreciar el esfuerzo de los empleados y reconocer su adaptabilidad frente a las dificultades les brinda una mayor motivación para seguir adelante. Una estrategia sencilla puede ser trazarse metas pequeñas, a corto plazo, que permitan un reconocimiento continuo, en vez de esperar a alcanzar un logro mayor.
Además, invertir en la formación de los colaboradores, no solo mejorará sus habilidades profesionales, sino que les ofrecerá técnicas de resiliencia y adaptación, frente a los cambios constantes. Se recomienda buscar capacitaciones enfocadas en habilidades blandas para los equipos de liderazgo y de técnicas de adaptación para el resto de los colaboradores.
Los cortes eléctricos en Ecuador representan un reto importante, pero también una oportunidad para que las empresas demuestren su compromiso con sus colaboradores. La adaptabilidad, la comunicación y la inversión en tecnología se convierten en las herramientas esenciales para enfrentar la crisis.