El presidente de la República Daniel Noboa Azin clausuró esta tarde, 15 de noviembre de 2024, la XXIX Cumbre Iberoamericana de Jefas y Jefes de Estado y Gobierno que se desarrolló en Cuenca. Tras la Sesión Plenaria, con la asistencia de autoridades de Iberoamérica y delegaciones oficiales, también se traspasó la secretaría pro tempore a
España y se suscribió la Declaración de Cuenca.
La XXIX Cumbre Iberoamericana posicionó al Ecuador como el escenario internacional para apuntalar a la concertación política del bloque que juega un papel geopolítico crucial actualmente. En esta edición, el encuentro de autoridades de Iberoamérica reflejó la intención de mantener unida a la comunidad —representada en 22 países— que apuestan por la cooperación y el diálogo.
En este punto, el presidente Noboa dijo: “Luego de las reuniones del 12 de noviembre, es momento de actualizar los procedimientos para la adopción de documentos en las próximas cumbres, que permitan alcanzar acuerdos sin resquebrajar lazos existentes”.
De igual manera, reconoció que la falta de integración en Iberoamérica tendría un alto costo, por eso es importante que en cada cumbre se busque un solo objetivo: edificar un mundo más justo y menos desigual.
Parte de la intervención del presidente Noboa se centró en detallar las acciones emprendidas por Ecuador durante los 18 meses en los que asumió la Presidencia Pro Tempore de la Cumbre Iberoamericana. Destacó los consensos alcanzados para la integración del bloque, señalando: “Hemos dado grandes pasos en áreas como la cooperación económica y la lucha para revertir el cambio climático”.
También auguró éxito a España en su próxima Presidencia Pro Tempore y agradeció a los países que precedieron a Ecuador en este rol, especialmente a la República Dominicana. El rey Felipe de España mencionó que la agenda trabajada en esta XXIX Cumbre Iberoamericana reflejará la vocación de convergencia y dialogo, propia de esta comunidad, que se aplicará también en los próximos dos años: “La Declaración de Cuenca, adoptada en
la cumbre, marca la senda de articular de respuestas a la demanda de la sociedad como la triple transición digital, ecológica y social que debe ser una oportunidad que signifique cambios de progreso y equidad”.
Al finalizar el traspaso Pro Tempore a España, el Jefe de Estado ecuatoriano subrayó: “En un mundo en constante cambio, creemos que la constante es la unidad porque así alcanzamos consensos y caminamos por la senda del desarrollo compartido. Quedan tareas pendientes y hemos visto también ciertos errores colectivos e individuales que se pueden mejorar”.
Cambio climático y combate a la delincuencia organizada en la Declaración de Cuenca En rueda de prensa, tras la clausura de la XXIX Cumbre Iberoamericana, la canciller ecuatoriana Gabriela Sommerfeld anunció que 19 países de la región aprobaron la Declaración de Cuenca de los países miembros de la comunidad iberoamericana. Además, se aprobaron 24 declaraciones especiales que incluyen líneas de acción en diversos temas clave. Entre estos destacan la lucha contra la delincuencia organizada transnacional, la promoción del empleo juvenil, la erradicación de la desnutrición crónica infantil, medio ambiente y entornos digitales, entre otros.
El secretario general Iberoamericano, Andrés Allamand, acotó que al aprobar la Declaración de Cuenca se seguirán impulsando los acuerdos que ya se trabajaron como la Carta de Principios y Derechos en entornos digitales; y se incluirá la situación del desempleo juvenil, propuesta por el presidente Noboa: “Vamos a enfocarnos en qué
políticas públicas se pueden implementar para que los jóvenes tengan acceso al trabajo”, dijo.
Al finalizar la rueda de prensa, José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación del Reino de España expresó: “Vamos a seguir creando comunidad. Queremos escuchar a todos los Estados de la comunidad iberoamericana, establecer consultas que generen una reflexión conjunta, medir las expectativas de nuestros ciudadanos iberoamericanos y sus gobiernos”.
La próxima cumbre se realizará en el 2026 en España. Hasta esta fecha, el bloque regional y España avanzarán en el reconocimiento de títulos y homologaciones, lucha contra la desinformación, y plan de acción que fomente el español y portugués en el ámbito científico, entre otros.