A inicios de mes, Pamela Cajape llevó a su hija al hospital municipal Ángel Felicísimo Rojas. En la cita le detectaron índices inferiores en su peso y talla.
La especialista le entregó medicinas, vitaminas y una asesoría nutricional. Esto fue posible gracias al Programa de Control del Niño Sano, que lidera el Municipio de Guayaquil, a través de la Dirección de Salud.
La madre, al salir del hospital, señaló de los factores que afectan también a otros niños de su barrio, en el noroeste de Guayaquil. “Algunos papitos trabajan y no tienen como estar ahí pendiente de que los niños coman. Otros papitos si están, pero están en el teléfono y no miran a los niños”, aseguró Cajape.
Todos los días la pediatra Lucy Chávez detecta casos de desnutrición en el hospital municipal, ubicado junto al Parque Comercial California. “De cada 10 pacientes, 6 están en desnutrición y 1 en obesidad, lo cual es bastante grave”.
La doctora dice que muchos padres tampoco colaboran con enviar a sus hijos a dormir temprano, lo que impide estimular la hormona de crecimiento para que alcancen la talla adecuada.
En Ecuador, según la Encuesta Nacional sobre Desnutrición Infantil (ENDI) 2024, el 19,3% de los niños menores de 2 años sufren de desnutrición crónica.
Por eso, el 15 de noviembre pasado el Concejo Municipal aprobó en primer debate el proyecto de Ordenanza que regula la prevención, vigilancia y reducción de la desnutrición crónica infantil dentro del Cantón Guayaquil.
La vicealcaldesa Blanca López, quien mocionó la propuesta, destacó que el objetivo es mejorar la coordinación de la Mesa Intersectorial Cantonal, que está alineada con la Estrategia Nacional Ecuador Crece sin Desnutrición Infantil.