Desde el sábado 14 de diciembre “prácticamente” una de las tres turbinas de la hidroeléctrica Alluriquín del complejo Toachi Pilatón ya está entregando energía al Sistema Nacional Interconectado (SNI).
Así lo indicó Azat Zatikov, apoderado general de la empresa Tyazhmash, este lunes, 16 de noviembre, durante el acto que realizó el Gobierno para el inicio oficial de operación de la turbina, que estuvo presidido por la ministra de Energía y Minas (e), Inés Manzano.
Zatikov indicó que si bien para que sea más formal la incorporación de la energía se deben realizar unos trámites entre la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec), el Operador Nacional de Electricidad (Cenace), la Agencia de Regulación y Control de Electricidad (Arconel) y la empresa que representa, “prácticamente desde antes de ayer la electricidad está llegando al SNI”.
La ministra Manzano explicó que la operación de la turbina se inició con la sincronización de la energía de esta central con el SNI, y una vez estable se realizará la entrega comercial.
La funcionaria señaló que “este logro aporta 68 megavatios (MW) adicionales al sistema eléctrico nacional, marcando un paso firme hacia la seguridad energética”.
Asimismo, añadió que “este proyecto que estuvo detenido por más de catorce años es una realidad, gracias al liderazgo del presidente Daniel Noboa y al esfuerzo conjunto del Gobierno, Celec, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército y la contratista Tyazhmash”.
Zatikov explicó que para acelerar los trabajos en la central desplegaron todos los recursos técnicos que dispone la compañía, tomando en cuenta por la situación que atraviesa el país, incluso dijo que varios de los ingenieros trabajaron todos los días, sin fines de semana libre ni vacaciones. “Creo que hoy podemos darles un par de días de descanso, de verdad que hemos puesto todo (sobre) la mesa de nuestra tecnología, de nuestros recursos para tener todo lo que tenemos por ahora y ya culminar y poner en marcha Alluriquín lo más pronto posible”, dijo.
La ministra también resaltó que la gestión comenzó con el ministro de Transporte y Obras Públicas, Roberto Luque, quien también se desempeñó como ministro encargado de la cartera de Energía y Minas tras la salida de Andrea Arrobo en abril pasado. “Él ha sido el que ha estado detrás de esto, al equipo de Celec y al viceministro de Electricidad y Energía Renovable, Fabián Calero”.
Según el viceministro, la sincronización consistió en hacer coincidir los parámetros del generador eléctrico con los del SNI. Estos son voltaje, frecuencia, ángulo de fase, secuencia de fase y forma de onda, y tras la sincronización, esta central inició con la entrega de los 68 MW. Este proceso continuará durante los próximos días hasta lograr estabilidad y confiabilidad en su operación.
La unidad que se encendió en Alluriquín es la primera de tres que entrarán en funcionamiento hasta enero de 2025 para aportar 204 megavatios, según explicó Manzano.
El complejo está integrado por las hidroeléctricas Alluquirín, cuya capacidad de generación es de 204 MW; Sarapullo, 49 MW; y una minicentral de 1,4 MW, en total, 254,4 MW de potencia instalada.
La ministra Manzano adelantó que la segunda turbina de Alluriquín comenzará operaciones también en este mes y la tercera será en enero. “El próximo febrero con la puesta en marcha de las dos unidades restantes… de hecho, una va a entrar ahora en diciembre. Hemos adelantado los tiempos, esperemos que sea hasta enero que tengamos las tres unidades y con estas tres unidades tendríamos la potencia instalada de 254,4 megavatios (del complejo Toachi-Pilatón en total)”, afirmó Manzano durante el encendido de la turbina.
Añadió que la energía generada en esta central beneficiará directamente a las provincias de Pichincha, Santo Domingo de los Tsáchilas y Cotopaxi. Además indicó que este proyecto evitará la emisión de 430.000 toneladas de CO₂ al año, alineándose con los compromisos globales de sostenibilidad.
Fuente: El Universo