El Ministerio de Energía y Minas adjudicó el campo petrolero Sacha al consorcio Sinopetrol, integrado por las empresas Petrolia Ecuador y Amodaimi Oil Company S. L., subsidiarias en ese orden de la canadiense New Stratus Energy y de la estatal china Sinopec.
La adjudicación se realizó la noche del viernes 28 de febrero del 2025, acogiendo la recomendación del Comité de Licitación de Hidrocarburos (COLH).
La cartera de Estado informó la tarde de este sábado, 1 de marzo, que realizará un conversatorio el próximo miércoles para dar información de este proceso.
Tras el informe fiscal presentado esta semana por el Ministerio de Economía se reunió el Comité de Licitaciones para tomar una decisión. Entonces, desde el Ministerio de Energía se indicó que entre los puntos negociados con el consorcio estaba que en los 20 años de concesión el Estado recibiría $ 6.314 millones de renta petrolera, incluyendo los impuestos.
De la renta petrolera al Estado le corresponderá el 81 %, que significan $ 5.802 millones, que incluyen la prima de $ 1.500 millones. Esa cantidad no abarca los recursos por concepto de pago de impuestos.
En cuanto a la repartición de la producción de crudo, el porcentaje de participación no es fijo. El esquema es “propio de la naturaleza del contrato de participación, donde el contratista asume todo el costo y riesgo”, porque el campo, en las condiciones actuales que presenta, requiere tecnología y modernización de los equipos, que tienen más de 50 años, indicó esta semana el subsecretario de Administración de Contratos, Luis Fernando Velásquez.
“No es solo de venir, inyectar plata y eso se produce solo. Son equipos que están, en su mayoría, con más del 60 % de obsolescencia. No solo trae riesgos hacia el personal, hacia la producción, sino que también trae riesgos hacia el medioambiente. Y todo esto está asumido por el consorcio”, comentó.
Y aseguró que todo lo establecido se apega al reglamento de aplicación de la Ley de Hidrocarburos: “El contrato de participación está diseñado para que, a menor valor del crudo, el Estado esté blindado y no tenga pérdidas”.
En ese sentido, los rangos contemplados van desde 0 hasta 30.000 barriles, desde 30.001 hasta 60.000 barriles y de 60.000 barriles para adelante, “y se establecen ciertos porcentajes que se cumplan”.
Además, el consorcio ofrece incrementar la producción a 100.000 barriles diarios o más. También ofrecen la perforación de dos pozos a nivel precretácico, que es una zona en el subsuelo en la cual se espera que exista crudo liviano y en gran cantidad.
Fuente: El Universo