Loja sigue en emergencia tras el desborde los ríos Malacatos y Zamora. Limpieza, reconstrucción y abastecimiento de agua avanzan, pero persisten riesgos en sectores afectados.
Las secuelas del aluvión en Loja siguen siendo visibles, mientras brigadas municipales y provinciales continúan con los trabajos de limpieza y remoción de escombros en el río Malacatos y sus alrededores.
A pesar del despliegue de maquinaria pesada, los restos de palizada y sedimentos aún representan un riesgo en varios sectores, incluyendo el Parque Lineal “La Tebaida”, donde las labores avanzan.
Desde Los Geranios, la comunidad ha alertado sobre la presencia de troncos y escombros que no han sido retirados, aumentando el peligro para peatones, especialmente niños y adultos mayores.
La situación ha generado preocupación, ya que algunas estructuras cercanas podrían colapsar debido a la acumulación de materiales en el cauce del río.
La prefectura de Loja y la dirección de Obras Públicas del Municipio de Loja han intensificado el uso de maquinaria para retirar el lodo y mejorar el flujo del agua.
Además, en el sendero de La Tebaida se ejecutan trabajos de soterramiento de cables eléctricos, con la instalación de zanjas y pozos para mejorar la infraestructura urbana.
La crisis también ha dejado sin agua potable a 41 barrios debido a la ruptura de tuberías.
Desde los primeros días de la emergencia, la municipalidad ha distribuido agua mediante tanqueros para abastecer a las zonas más afectadas, especialmente en el sur de la ciudad.
Paralelamente, cuadrillas trabajan en la reposición de la red de tuberías para restablecer el suministro lo antes posible.