Hoy en día muchas personas se sumergen en la lectura, y cada vez más lo hacen a través de dispositivos digitales. Un estudio de la American Academy of Ophthalmology (AAO) revela que la exposición prolongada a la luz azul de dispositivos digitales puede contribuir a la fatiga visual digital, sequedad ocular y alteraciones en el sueño debido a la supresión de melatonina
El Dr. Alejandro Lalama, Jefe de Optometría de Óptica Los Andes (OLA), explica que el tiempo de exposición a pantallas influye directamente en el cansancio ocular y recomienda adoptar hábitos saludables para proteger la vista. “El ojo humano no está diseñado para fijarse en una pantalla por largos períodos sin descanso. La clave está en encontrar un equilibrio y aplicar técnicas que reduzcan la fatiga visual”, señala.
Por ello, el experto de OLA ofrece información valiosa sobre los efectos de la lectura digital en la visión, así como algunas recomendaciones para evitar molestias.
Impacto de la lectura digital en la salud visual
Leer en dispositivos electrónicos puede generar diversas molestias debido a la exposición prolongada a la luz azul y la disminución del parpadeo natural. Algunos de los efectos más comunes incluyen:
- Fatiga visual digital: Se manifiesta con visión borrosa, picazón y sensación de pesadez en los ojos tras un uso prolongado de pantallas.
- Síndrome del ojo seco: El parpadeo disminuye hasta un 50% al leer en dispositivos, lo que genera sequedad e irritación ocular.
- Dificultad para conciliar el sueño: La exposición a la luz azul antes de dormir puede alterar el ciclo natural del sueño, afectando el descanso.
- Dolores de cabeza y tensión ocular: El esfuerzo continuo para enfocar letras en pantallas iluminadas puede derivar en cefaleas y molestias en la zona de los ojos.
Consejos para una lectura digital saludable
Para minimizar los efectos negativos de la lectura en dispositivos electrónicos, es recomendable seguir estos hábitos:
1. Elegir dispositivos adecuados
Optar por eReaders que son dispositivos electrónicos diseñados específicamente para la lectura de libros digitales. Utilizan tecnología de tinta electrónica (e-ink), lo que reduce el brillo y el reflejo de la pantalla, ofreciendo una experiencia de lectura más parecida al papel impreso y menos agresiva para la vista en comparación con las pantallas LED o LCD de las tabletas y teléfonos.
2. Ajustar la configuración de la pantalla
- Brillo: Debe coincidir con la iluminación del ambiente para evitar contrastes agresivos.
- Tamaño de fuente: Elegir un tamaño de letra cómodo que no obligue a forzar la vista.
- Contraste y color: Se recomienda texto oscuro sobre fondo claro o un modo sepia para reducir el impacto en los ojos.
3. Mantener una distancia adecuada
La pantalla debe estar a una distancia de 40 a 50 centímetros de los ojos para evitar tensiones innecesarias en los músculos oculares.
4. Aplicar la regla 20-20-20
Cada 20 minutos, mirar un objeto a 6 metros (20 pies) de distancia durante 20 segundos. Esta técnica ayuda a relajar los músculos oculares y prevenir la fatiga visual.
5. Parpadear con frecuencia
El experto de OLA señala que cuando se usa un dispositivo digital, el parpadeo disminuye, lo que provoca sequedad ocular. Es importante hacer pausas para parpadear y, si es necesario, usar lágrimas artificiales para mantener la hidratación.
6. Leer con buena iluminación
La luz ambiental debe ser suficiente para no forzar la vista, pero sin generar reflejos en la pantalla. Se recomienda evitar leer a oscuras con la pantalla demasiado brillante.
7. Limitar el tiempo de lectura antes de dormir
La exposición a pantallas antes de dormir afecta la producción de melatonina, lo que puede alterar el sueño. Se recomienda evitar la lectura en dispositivos electrónicos al menos una hora antes de acostarse.
8. Realizar ejercicios oculares
Practicar ejercicios como movimientos circulares con los ojos o enfoque de objetos cercanos y lejanos ayuda a relajar la musculatura ocular y prevenir molestias.
La lectura digital es una herramienta accesible y práctica, pero su uso prolongado puede afectar la salud visual. Aplicar estos consejos permitirá disfrutar de los libros electrónicos sin comprometer el bienestar de los ojos.
Cuidar la salud visual es fundamental en un mundo donde el uso de dispositivos digitales es cada vez más frecuente. Adoptar buenos hábitos, como hacer pausas durante la lectura y ajustar la iluminación, puede marcar la diferencia en el bienestar ocular. Además, realizarse chequeos visuales periódicos con un especialista es clave para detectar a tiempo cualquier problema y garantizar una visión óptima a lo largo del tiempo.