En un evento multitudinario realizado en la avenida 9 de Octubre de Guayaquil, la candidata presidencial Luisa González cerró su campaña electoral con un llamado firme a la unidad nacional y al cambio definitivo para el Ecuador.
El primero en tomar la palabra fue Diego Borja, candidato a la vicepresidencia, quien señaló la gravedad de la crisis actual y la necesidad de un liderazgo firme que defienda al pueblo con dignidad y no con violencia. “Vamos a cambiar la inseguridad, pero jamás con grupos paramilitares y mercenarios. Vamos a combatir la delincuencia con nuestras Fuerzas Armadas, con nuestra Policía Nacional; a ellos les vamos a equipar, les vamos a dar toda la facilidad, la capacitación”, señaló.
En su discurso, Borja llamó a acudir masivamente a las urnas “para tener a la primera mujer presidenta del Ecuador”
Por su parte, Luisa González abrió su intervención con un mensaje de agradecimiento a todos los sectores del país que han decidido sumarse a este proyecto político. “Estamos aquí, unidos por ustedes, queridos hermanos”, expresó, dirigiéndose a una multitud que respondió con entusiasmo, banderas y consignas. “Cinco partidos políticos que representamos al pueblo ecuatoriano, a los pueblos y nacionalidades indígenas y afros, cholos, montubios, una patria unida.”
Subrayó también que esta unión trasciende banderas ideológicas, afirmó, destacando el respaldo de presidentes de juntas parroquiales, alcaldes, prefectos de partidos de la derecha, e incluso de figuras como Jan Topic, a quienes ha convocado a conformar un gabinete nacional con hombres y mujeres sin bandera política. “Vamos sin miedo, con alegría, con esperanza. Este es el cambio definitivo, la dignidad de un pueblo que merece días mejores.”
Antes de concluir, hizo un llamado directo a la participación activa y consciente: “Que el domingo 13 de abril nadie se me quede en la casa. Todos a votar en las urnas y después a cuidar nuestro voto. Aquí nadie descansa”, expresó. Finalmente, cerró su intervención con un mensaje cargado de emoción, justicia social y compromiso: “Vamos a dejar atrás estos días oscuros y vamos a sembrar este país de dignidad y esperanza. Estamos aquí, unidos por ustedes, queridos hermanos, por un pueblo que clama por justicia, por siete millones de personas