• El estudio revela que los padres de la región solo pueden dedicar entre 2 y 4 horas entre semana a sus hijos, lo que subraya la importancia de que este tiempo sea de calidad y con total atención.
• A nivel regional el 60% de los padres afirman que recurren a permitir la realización de actividades especiales como el cine, parques de diversiones, paseos o viajes para compensar este tiempo.
• Por eso, el objetivo es compartir tiempo de calidad caracterizado porque los padres están plenamente presentes y conectados emocionalmente con sus hijos, sin distracciones, interrupciones ni el uso de pantallas.
El poco tiempo que comparten los padres con sus hijos puede impactar el bienestar emocional de los niños y la forma en la que se relacionan a futuro. Un estudio realizado por la marca de galletas Oreo de Mondelēz International, sobre crianza moderna revela que el 74% de los padres siente la necesidad de compensar a sus hijos por el tiempo que no pasan juntos. Lo anterior, teniendo en cuenta que el 68% de los padres afirma que encuentra barreras como el cansancio y las labores del hogar.
El estudio realizado contó con la participación de padres en la región latinoamericana que tienen hijos de 7 a 13 años. Los resultados muestran que los padres consideran que su rutina afecta significativamente su capacidad de pasar tiempo de calidad con sus hijos y que, en promedio, solo logran dedicar entre 2 a 4 horas a sus hijos entre semana. Por lo tanto, es esencial que el tiempo que los padres comparten con sus hijos sea de calidad y de total atención.
Los padres buscan alternativas como cambiar a un empleo que comprometa menos horas de trabajo o asumir una actitud de indulgencia de manera ocasional, pues a nivel regional el 60% de los padres afirman que recurren a permitir la realización de actividades especiales como el cine, parques de diversiones, paseos o viajes para compensar este tiempo. Incluso el 37% pueden dejar que los niños dediquen más tiempo a actividades que les gustan como jugar con celulares, videojuegos y ver televisión. Además, el 45% afirma que la compensación también se manifiesta en la elección de alimentos, mientras el 27% les entrega regalos como juguetes, juegos o ropa de su preferencia.
“Conjugar la tarea de la paternidad con los requerimientos profesionales o personales de la vida moderna, requiere compromiso, creatividad y sobre todo de la conciencia de que, formar a nuestros hijos, es una tarea que requiere tiempo y presencia. La “robotización” de actividades como apurarlos para que merienden pronto, para que se bañen pronto, para que duerman pronto y entonces “estemos libres” son contraproducentes, pero son conductas usuales cuando el adulto llega a casa. Al cruzar el portal a casa luego de la jornada laboral, volvamos a nuestro rol de padres y madres, priorizando a nuestros hijos que han esperado 8 o más horas para volver a vernos.”, recomienda Paulina Véjar psicóloga clínica, terapeuta familiar sistémica, amplia experiencia en asesoría a familias y trabajo en colegios.
Según el estudio realizado por la marca de galletas Oreo de Mondelēz International, los padres han manifestado que únicamente dos horas de su tiempo con sus hijos se consideran como «tiempo de calidad» y que, a pesar de las diversas limitaciones, estos momentos son altamente valorados por ellos. En relación con esto, se recomienda implementar tiempo de calidad con los hijos como un aspecto crucial para fortalecer lazos emocionales, fomentar su desarrollo, apoyar el aprendizaje y mejorar la comunicación, contribuyendo al bienestar integral de los niños y creando un ambiente familiar armonioso.