Heladería Zanzíbar ha sido sinónimo de innovación en el mercado de helados, convirtiéndose en un referente desde la apertura de su primer local en 1982, en la Av. 6 de Diciembre y Belorizonte, en Quito. Este año regresa con más fuerza que nunca, reabriendo sus puertas con nuevos sabores y una experiencia renovada para ofrecer nuevamente sus helados super premium elaborados con leche 100% grass fed.
El pasado 10 de julio de 2024, Zanzibar inauguró su nuevo local en la Plaza Hilacril, en Tumbaco, con una inversión de 50,000 dólares. Este moderno espacio, diseñado para brindar confort a las familias, marca el inicio de una nueva etapa para la heladería, con el objetivo de expandirse y ofrecer sus deliciosos helados a más ecuatorianos. Con esta reapertura, Zanzibar reafirma su compromiso de seguir innovando y ofreciendo productos de calidad en un ambiente acogedor.
Los helados se producen con ingredientes de la más alta calidad, como leche fresca de vacas de libre pastoreo en Cayambe. Con menos del 25% de aire en su mezcla, se asegura una textura cremosa y un sabor auténtico que ha sido perfeccionado con el tiempo. Además, los ingredientes que se utilizan para la preparación son elaborados de manera artesanal, como el caramelo, los brownies y pulpas frutales, asegurando de esta manera la calidad de sus productos y el apoyo a la producción nacional.
Con más de 20 sabores clásicos como caramelo, manjar y café, la empresa se encuentra en constante desarrollo e innovación. Este mes de octubre, la heladería lanza tres nuevos sabores como edición limitada: Matcha, Earl Grey Tea y Honeycomb, los cuales serán evaluados por los consumidores para decidir si formarán parte del menú de forma permanente. Además, como parte de su propuesta innovadora, presentará en noviembre un helado de temporada: Pumpkin Pie, el sabor perfecto para celebrar Halloween y Thanksgiving, capturando así la esencia de estas festividades.
La empresa fundada por la familia Tobar, llegó a tener 18 locales distribuidos en las ciudades de Quito, Guayaquil, Cuenca y Machala. Durante la pandemia, su fundador, José Tobar comparte este legado con toda su familia, para que las futuras generaciones continúen con la visión y los valores que hicieron de Zanzibar un referente en el mercado ecuatoriano de los helados.
La marca proyecta un crecimiento continuo, con planes de abrir más locales en Quito y expandirse a nivel nacional, siempre manteniendo su compromiso de ofrecer helados “super premium” de la más alta calidad, que acompañen a los ecuatorianos en sus momentos más especiales.